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viernes, 15 de diciembre de 2017

MASONERIA: SU ORIGEN Y DESARROLLO ACTUAL




A donde se vaya, luego que nuestro interlocutor se entera que uno es masón, surgen diversas interrogantes, y una de ellas es, donde se originó la masonería, habida cuenta que los albañiles, picapedreros y constructores han dejado obras magistrales en todo el mundo, que testimonian la planificación, orientación, conducción, la capacidad de organizar y especializar a los constructores. Porque no basta que existan buenos planos, se requiere de una depurada técnica constructiva y artística, de una gran capacidad de producción de alimentos y un complejo sistema logístico, como ocurre hasta hoy.

Todo esto no es producto de ninguna casualidad, como no es casualidad la construcción del zigurat en Sumeria (Irak), pirámides en Egipto, pirámides en Caral (Perú), en China, en la India o en Centro América. Detrás de cada una de esas construcciones, existe una larga historia, donde el constructor se transforma, en un emisario en el tiempo, que plasma todo el saber de su época, su ciencia, costumbre, mitos, religión, esoterismo y otros, en las construcciones.

En Sumeria y Egipto se encontró la escritura cuneiforme y jeroglífica. En el Perú aún se debate si existió escritura que data de esa época, pero todos ellos construyeron pirámides, así como otras civilizaciones posteriores.

Algunos dicen que el hombre y su sabiduría vienen de dios, otros afirman que es producto de la evolución. También se dice que el hombre es producto del manejo genético de seres llegados de otros planetas, que mejoraron el conocimiento del hombre, pero, ninguno deja de reconocer que el hombre es constructor desde época inmemorial y que muchos de sus secretos se perdieron en la noche del tiempo, o que fueron guardados celosamente en las escuelas iniciáticas.

Algunas variantes de las diversas propuestas no descarta la mítica Atlántida: Los egipcios, a un lado del océano, y los mayas e incas al otro, son los últimos supervivientes de la raza atlante, que vivía antaño en un continente inmenso en medio del océano Atlántico. Una tesis audaz, pero que se apoya en gran número de pruebas arqueológicas, artísticas, rituales e, incluso, según algunos: iniciáticas.

En la antigüedad los Misterios o Altos Secretos representaban la sabiduría y la ciencia de aquel tiempo. Los Templos eran el recinto de las escuelas iniciáticas, donde impartían enseñanzas luego de un procedimiento que denominamos Iniciación. La enseñanza de la sabiduría era paralela al culto de las Divinidades para los iniciados. Para el pueblo, el templo era el lugar donde se realizaba ceremonias místicas en honor a las divinidades; se acostumbró a la población, a respetar el recinto de los templos y a la clase sacerdotal.

La Iniciación por entonces, no era otra cosa que la captación de individuos escogidos para desempeñar cargos sacerdotales, magos o astrólogos, a quienes sometían gradualmente a pruebas de resistencia física, a pruebas de valor y capacidad intelectual, enseñándoles, a la vez, los conocimientos científicos de entonces y promoviendo en el iniciado el interés por la investigación de lo desconocido.

Los Sacerdotes, o sabios, fueron los profesores de las escuelas de misterios. %u201CTransmitían%u201D o %u201Cconfiaban%u201D los %u201Csecretos%u201D de la sabiduría a los escogidos, que eran seleccionados por su habilidad y capacidad para comprenderlos.

Los idiomas primitivos se componían de pocas palabras, las expresiones carecían de exactitud y precisión que demanda la ciencia; los profesores dentro de estas limitaciones, enseñaban por medio de instrumentos, símbolos, alegorías, cuñas, jeroglífos, figuras, etc.

La sabiduría, entonces era el estudio de lo misterioso y de lo divino, que influenciaba bien o mal la vida humana; estudiaron a los astros y sus agrupaciones, los planetas y los movimientos de éstos (la astrología y los signos zodiacales), los elementos (aire, tierra, agua y fuego), los fenómenos físicos y su influencia en la vida, etc., todo ello gradualmente, se convirtieron en las ciencias naturales de hoy. La Astronomía, la Física, la Química, la Geometría y la Aritmética, cuyos orígenes estan los antiguos misterios o también llamadas escuelas iniciáticas.

Los sabios, impulsaban el deseo de penetrar más allá del límite de las ciencias naturales, a estudiosos e investigadores, a ambicionar el conocimiento o ciencia, a utilizar el método lógico deductivo en sus obras o estudios, así como aprovechar racionalmente el utilitarismo de estos conocimientos, considerados privilegios otorgados por los dioses. Todo ello dio origen a diversas y numerosas filosofías, más o menos científica, más o menos fantásticas, más o menos lógicas, más o menos utilitarias, según sus conocimientos, el carácter, el impulso o el interés del que filosofaba.

Para transmitir de generación en generación los misterios, o ciencia primitiva, los sabios de entonces, personificaban los fenómenos físicos, los astros, los planetas y sus movimientos, como los héroes de sus Cuentos Alegóricos y mitos, los simbolizaron en jeroglíficos, en construcciones arquitectónicas, en monumentos, en esculturas, en grabados, en pinturas, etc.

Como explicar de otro modo las similitudes, a veces sorprendentes, que pueden comprobarse entre las concepciones religiosas y astronómicas, la arquitectura y, en general, la civilización de los egipcios, los sumerios, los incas, los toltecas y los mayas.

Son testimonios de lo dicho, las ruinas arqueológicas piramidales en todo el mundo, esfinges, sepulcros, objetos y artefactos antiguos. La escrituras cuneiforme de los sumerios, la escritura de glifos de los egipcios y mayas, así como los tocapus incas.

El significado de los cuentos alegóricos y de los símbolos, se enseñaban a los iniciados y éstos los transmitían a las nuevas generaciones. Esta forma de transmisión de los conocimientos se hacía con las Artes, Música, Gramática, Lógica, Retórica, etc.

Los antiguos sabios, eran a la vez: patriarcas, sacerdotes y gobernadores de sus pueblos, auxiliados por escribas e iniciados. Ellos crearon las leyes, la moral, las religiones, los cultos y las doctrinas, de acuerdo a las costumbres y necesidades de sus pueblos o como soporte a los intereses de las castas superiores.

El origen de las leyes antiguas (Código de Ur Nammu 2,050 a.C., el código de Eshnunna 1,930 a.C., Lipit %u2013 Ishtar de Isin 1,870 a.C., y Hammurabi 1,760 a.C. y Sanherib o Senaquerib 690 a.C.), está en las costumbres, en la vida familiar, basada en los instintos de defensa mutua, tanto de la naturaleza como de las familias vecinas, que con frecuencia se atacaban unas a otras. Con el crecimiento numérico de las familias, se generalizo sus costumbres y se convirtió en leyes de los pueblos que resultaban de la unión de aquellas. Estas leyes, tenían la forma de prescripciones morales, amoldada a los intereses de los pueblos. Las leyes más antiguas se dieron en china, pero los códigos escritos más antiguos que se hallaron son los de sumeria, babilonia y Egipto.

El Decálogo de Moisés es otro ejemplo, sirvió como ley al pueblo hebreo, y según la biblia, sabemos que fue educado en Egipto, donde fue considerado hijo de una princesa egipcia e iniciado en los misterios de esa civilización, que era la más depurada de aquel tiempo, tanto en las ciencias, como en los preceptos morales que regían como leyes.

A medida que los pueblos crecían, sus relaciones e intereses se entrelazaban con el intercambio comercial, social y científico. La gente emigraba por distintos motivos, llevando los conocimientos y su civilización a nuevos lugares que poblaban. Por esto los conocimientos y arte arquitectónico de los sumerios y de otros pueblos mesopotámicos, fueron conocidos por los tirios y transmitidos a los hebreos, que a su vez lo hicieron a griegos, romanos y a toda Europa en forma similar a lo que hicieron los egipcios.

La evidencia de que los tirios transmitieron sus conocimientos a los hebreos, se encuentra en la biblia, donde se narra la construcción del templo del Rey Salomón. Esta leyenda dice, entre otras cosas, que cuando el rey de los hebreos quiso construir un templo en honor de la divinidad adorada por su pueblo (Jehová), no encontró entre sus súbditos, gente apta suficiente en el arte de la construcción, y por tanto, tuvo que valerse de la amistad con Hiram I rey de Tiro, cuya cultura era más avanzada. Salomón solicitó a dicho rey, obreros especializados y materiales de construcción, el rey de Tiro accedió a la petición de Salomón, enviándole los obreros que construyeron con material apropiado, en lugar indicado por Salomón, un templo que simbolizaba artísticamente el Universo y revelaba las convicciones y la sabiduría de los tirios, que adoraban al Sol y tenían una civilización influenciada por los mesopotámicos y egipcios, considerados como la civilización universal de aquel tiempo.


El acucioso investigador masón Herbert Oré Belsuzarri, luego de varios años decidió escribir este libro que ya esta considerado como un "clásico actual" de la literatura masónica. El texto en lenguaje ameno y ágil permite adentrarse no solo en los aspectos históricos de interés masónico, sino que los engarza con la historia universal para hacer de ella una narrativa simplemente apasionante y actual.

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jueves, 14 de diciembre de 2017

¿DONDE ESTÁN LOS HIJOS DE CAÍN?



En las diferentes oportunidades, en que se trata el tema de la Leyenda Masónica de Hiram Abiff, personaje extraído de la Biblia, surgen opiniones muy interesantes sobre ella, su simbología y las enseñanzas que de ella surge. Esto lleva a temas que están vinculados dentro de la biblia, a la genealogía de Hiram Abiff, Tubal-caín, Caín y sus padres.

Tratando estos temas, es inevitable hablar sobre la creación, aparición o evolución del hombre, y como es natural surgen diferentes puntos de vista que enriquecen aspectos que con poca frecuencia se puede tratar en forma aislada, por el temor fundado de dejar inconcluso la materia en cuestión.

Hiram Abiff, personaje vinculado con la construcción del Templo del rey Salomón biblico, permite a partir de ella que surgan otros temas, que estan ligados con los anteriores mencionados, siendo preferente tratarlo en un momento distinto, para aprovechar mejor la simbología y enseñanzas que de ella se desprenden. Por esta razón es sugerible que se busque la más amplia información para disfrutar mejor, la gama de temas y enseñanzas, que de ella se desprende para los masones.

Es materia del presente librocomentar la biblia, el Tanaj, Corán, tablillas sumerias y otros documentos en forma ligera, desde la creación del mundo hasta momentos previos a la construcción del Templo de salomón, evitando en lo posible trastocar o tergiversar, asuntos de fe religiosa, que no es de nuestro interés, ni por asomo. Quisiéramos ser, lo más racional posible para que cada quien forme y saque sus propias conclusiones.

La lectura de la Biblia, el Corán y el Tanaj, ha sido por muchas generaciones, un asunto incustionable de fe religiosa, todo lo que allí se dice era verdad absoluta. Hay de aquel que lo cuestione, podía perder la vida, caer en desgracia dentro de la sociedad, ser apartado por hereje y darle otros tantos castigos, con atrocidades que la historia de la humanidad recuerda y que debemos desterrarla para nunca más cometerla.

Se hicieron grandes guerras, en nombre de la fe y hasta hoy se siguen realizando, entre humanos con dioses de distinto nombre, cuya única controversia es: Tener un dios propio.

La intolerancia y los fundamentalismos religiosos en el pasado como en el presente se manifestaron, variando su intensidad, en función a los medios que disponen. Desde que llegue al mundo, no recuerdo un solo día en que los hombres realmente hayan convivido en paz. En algún lugar del mundo el hombre mata, aniquila o hiere a quien tiene una forma diferente de expresar su fe.

Por otra parte, siempre hubo hombres y organizaciones que intentaron evitar las guerras y la perdida inútil de vidas, que proponen y practican la tolerancia, que los “avatares”, de las diferentes religiones del mundo lo pregonaron a lo largo de la historia de la humanidad, con los resultados que todos conocemos.

Una de esas organizaciones, es la masonería, escuela iniciática que practica la tolerancia religiosa y política. Evita las discusiones de temas religiosos y políticos en su seno, pero permite la exposición de todo el pensamiento humano, para que cada uno pueda tomar lo que considere pertinente y a la vez respeta las ideas que no comparte. Eso es la magia del método masónico, que exitosamente ha permitido en todo momento tener en sus logias la paz que busca el hombre libre, para encausar sus energías en la solución de los retos de la sociedad.

Por eso sorprende a iniciados y profanos, enterarse que hombres y mujeres de las más diversas opiniones, algunas consideradas irreconciliables, pueden tratar en armonía temas que los unen y generar puentes de entendimiento en la sociedad. ¿Por qué los masones lo pueden hacer y los otros no? Porque ellos conocen la luz, que los libra de las cadenas de la intolerancia y de la ignorancia, y esta respuesta, siempre esta al alcance de todos.

Quienes los atacan a los masones, curiosamente son los intolerantes religiosos, los fundamentalistas que cada religión tiene, aquellos cuya formación intelectual es deficiente y los hace esclavos de las pasiones humanas. Estos pues, no tiene mejor argumentos que llamar a los masones: hijos de satanás, lucifer o del diablo, y en el pasado por este estigma, persiguieron a muchos hombres libres, sin embargo los masones a cubierto no se detuvieron, y continuaron construyendo nuestra sociedad. Esos son los masones, que generan silencioso respeto en todas las sociedades, cuando se enteran que figuras destacadas son masones.

En el pasado como ahora, la masonería apertura sus templos, a todos los hombres y mujeres, que buscan ser mejores humanos y que el conocimiento acumulado a través de los siglos, llegue a todos como una luz, que puede ser difundida, emitiéndola o reflejándola, generando espacio para una sana oportunidad de evolucionar.

No hay ciencia ni conocimiento que no pueda ser entendida, solo se requiere de la oportunidad. El hombre puede cambiar y adaptarse a fines más altruistas, que a sus fines egoístas. El hombre es siempre el autor de si mismo, y esto marca la esperanza y las perspectivas de la evolución: “sabemos lo que somos, no sabemos lo que podríamos ser”.

Asi, desde tiempos inmemoriales, los masones han luchado por desterrar la intolerancia, con relativo éxito, buscando la luz de la verdad y expresando su opinión en diversos temas de la ciencia y asuntos de nuestra sociedad, con el único deseo de contribuir, a superar nuestras dificultades humanas. Sin embargo debemos admitir que en algunos temas nuestro aporte es insuficiente, y eso es quizá el aliciente, para remozar nuestro esfuerzo para acometer con renovada fuerza, junto a todos los hombres y las mujeres de nuestra sociedad. No olvidemos que no hay esfuerzo grande ni pequeño, lo que importa, es el resultado de ello.


El autor de este libro de interés masonico es Herbert Oré Belsuzarri y se puede adquirir junto a otros más que han sido publicados en lulu.com: 

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miércoles, 13 de diciembre de 2017

HIRAM ABIF EN BLANCO Y NEGRO, UN LIBRO APASIONANTE




Es un error considerar la leyenda Hiramica como histórica o como una expresión puramente religiosa. Hubo un Hiram Abif en la narración del Tanaj y la Biblia y es parte de la historia hebrea. El Hiram Abif del Tercer Grado de la masonería, es el personaje de un drama, de un conflicto de un hombre con los demás hombres, de un individuo contra las fuerzas del mal encarnadas en otros hombres. Hiram Abif es el símbolo dramatizada del alma del ser humano, mío, tuyo y de cada hombre. Los enemigos de Hiram son simbólicamente los deseos y las pasiones, los fracasos del espíritu. La muerte de Hiram y su resurrección, es el triunfo de la verdad sobre la ignorancia.

Esa es la importancia real de la leyenda de Hiram, que todavía mueve a los hombres a servir a la verdad, manteniendo con firmeza la necesidad de sus aspiraciones más nobles, incluso a la aparente derrota en la muerte, de la cual puede surgir una más perfecta para estar perpendicular.

La leyenda de Hiram, es la sustancia sin la sombra del destino manifiesto de la vida, que no requiere pintura, solo apenas una palabra para hacer una impresión duradera, a todos los que la vivencian. Los Maestros Masones, cuando trabajamos en “los misterios de la masonería”, hacemos de la leyenda de Hiram, una verdadera expresión sublime, de la naturaleza del hombre que se levanta victorioso ante sus propias limitaciones, que transformando su piedra bruta en piedra cubica, que destierra las tinieblas con la luz, para vivir en armonía con los demás.

Puede obtener más información sobre este singular personaje, en el apasionte libro "Hiram Abif en Blanco y Negro", de Herbert Oré Belsuzarri. Un libro simplemente excelente.

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martes, 12 de diciembre de 2017

EL REAL ORIGEN DE LA MASONERIA




Todos aquellos que han tratado de rastrear la francmasonería de sus propios registros escritos están persuadidos que todos los oficios de la actualidad son desarrollo de un arte similar de los antiguos tiempos. Demostrable con los estudios de restos arqueológicos, escrituras antiguas y como no, también con tradiciones y mitos.

La construcción de edificios ha sido una ocupación común del hombre a través de miles de años, desde que el hombre creó las ciudades. Pero de eso se habla muy poco en la orden, sin embargo, admitir que la francmasonería sea descendiente de estas antiguas fuentes, es similar a aceptar, que los gobiernos democráticos actuales son descendientes de los de Grecia, Roma y otras culturas más antiguas, donde habían principios e instituciones que funcionaban, y de los cuales tomamos sus principios y construimos sobre ellos los nuestros, conforme a nuestras necesidades de espacio-tiempo.

La posesión de viejos temas por parte de instituciones jóvenes, justifica de alguna manera en las sociedades iniciáticas, antedatar el certificado de nacimiento de las más modernas, cosa que frecuentemente se ha intentado y esos temas han sido los tenues lazos por los cuales la Orden Moderna estaría presumiblemente ligada a otras de tierras y épocas distantes.

Esta forma de pensar que expone Henry Wilson Coil, no es casual. Sus estudios sobre la masonería tenían más de 40 años, cuando publicaron el artículo que hemos mencionado, y era un distinguido miembro de la orden del Rito de York y un Ilustre y Poderoso Hermano del grado 33° en los EE.UU.

Opinión similar tiene otro distinguido miembro de la orden, en este caso John Hamill, bibliotecario y curador de la Gran Logia Unida de Inglaterra, quien dice: Anderson no efectúa distinción alguna entre Masonería Operativa y Masonería Especulativa, con lo cual quedó implícito que la una era la continuación de la otra. En este caso se hace referencia a James Anderson, quien publica en 1,723 Las Constituciones de Anderson que es el documento inicial de la masonería especulativa inglesa. James Anderson, era un pastor presbiteriano y masón, coautor, junto a Jean Théofile Désaguliers, Gran Maestro de la Gran Logia de Londres en 1,719, de las primera Carta Constitucional de la francmasonería moderna o especulativa, conocidas comúnmente como las Constituciones de Anderson.

Bien, en ese orden de ideas, por origen de la masonería, queremos decir, que es a semejanza de una orden iniciática anterior, ya que los principios generales, costumbres y ritos, se han mantenido en el tiempo, pese a la continua reposición de miembros desde los antiguos tiempos hasta el presente. Por esa razón, los masones operativos decían que los orígenes de la masonería se hallaban junto a los personajes bíblicos en el Medio Oriente.

La historia no es estática, cambia conforme la información de los hechos se modifican con elementos más fiables. Esto es mucho más acertivo si de historia antigua se trata, como es el caso de la masonería, por ello Herbert Oré Belsuzarri, en su libro "El Real Origen de la Masonería", nos brinda una mirada nueva, a documentos antiguos, para hacer un estudio distinto sobre los origenes de la masonería. ¿Estarán los masones dispuestos a confirmar lo que sus antiguos hermanos afirmaban?

Puede adquirir el libro en: lulu.com

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lunes, 11 de diciembre de 2017

RELIGION Y MASONERIA TOMO I Y TOMO II





Nuestro mundo ha sido modelado por dios, que duda cabe, pero la cuestión radica si lo que hace el hombre es atribuible en forma consiente a la voluntad de dios, o es solo atribuible a un hecho cultural de ser el destinatario de las necesidades y hechos humanos. Lo primero es tratado por las diversas religiones del mundo que no admiten duda, ni precisan pruebas para afirmar la existencia de dios ¡Dios Existe y todo prueba su existencia! Dios es el origen y el fin de todo cuanto se pueda conocer o imaginar, por tanto no hay nada fuera de él. Lo segundo es tratado por la historia, arqueología, antropología, psicología y otras disciplinas de la ciencia, que intenta comprender toda la gama de comportamientos del humano que conforman lo que llamamos cultura o civilización. De este tipo de dios que es conceptuable en cada cultura o civilización, hay evidencias y pruebas materiales que permiten su análisis y discusión. La discusión se ha dado siempre, pero los resultados de ella han sido diferentes conforme a su tiempo. En algunas épocas, expresar la más pequeña duda sobre la existencia de dios, o sobre el comportamiento de quienes lo invocan, generó persecución y muerte, generando temor y silencio en el hombre que siempre es crítico con su entorno. Hoy vivimos una mayor apertura para tratar estos temas, pero aún es fuerte la intolerancia de los religiosos, así como sus confrontaciones violentas, entre los que profesan diversas religiones. El hombre aún no aprende que ningún dios se alegra con la muerte del prójimo, ni que la predica religiosa debe ser diferente a la práctica de ellas.

La religión como cualquier proceso natural o social tiene su historia, aparece en la sociedad primitiva como expresión de la impotencia del hombre en su lucha contra las fuerzas naturales que lo dominaban. En esta situación los hombres primitivos atribuyeron a los fenómenos materiales cualidades supra terrenales. Esta forma de religión es denominada “deidificación de la naturaleza”, o sea el estado animista de representación. Así surgieron los mitos, las leyendas religiosas y toda clase de deidades y fantasías, como ocurre incluso ahora.

El politeísmo surge con la desintegración de la comunidad primitiva para dar paso al surgimiento y desarrollo del sistema. La pluralidad de dioses y su personificación guarda relación con el proceso de formación de clases antagónicas: Dioses superiores para las clases dominantes y Dioses inferiores para las clases dominadas.

Tanto la historia profana y sagrada, coinciden en que es Babilonia donde surge todo el sistema idolátrico y ocultista más antiguo. De hecho, si se comparan todas estas religiones politeístas, sus dioses y sus ceremonias con la matriz ideológica que las dio a luz y vamos a encontrar en ellas, grandes similitudes.

Las religiones y las sociedades iniciáticas se forman paralelamente, nacieron con la finalidad de preservar los conocimientos, la ciencia, la fe, el orden y las leyes, a través de “elegidos” o “escogidos”, cuyas virtudes serían la garantía de que lo que se guarda, se conservaría y utilizaría para beneficio de la humanidad, así los “misterios” fueron transmitidos de generación en generación durante los siguientes milenios, pero las religiones así como las escuelas iniciáticas se fueron dividiendo en otras, ya sea por la dinámica de su propio crecimiento, como por matices “ideológicos” que surgen en su interior, fraccionándose conforme a sus propias necesidades. Solo una escuela mantiene su unidad, a veces protegida por el poder terrenal de turno y en otras perseguidas. ¿Cuál es el secreto para que haya perdurado en el tiempo? Después de haber dialogado en algunos casos o leído en otros, nuestra conclusión no es única, tiene elementos comunes a otros que se dieron en su propio espacio-tiempo-histórico, inherente a cada iniciado: No discutir de religión, no discutir de política, ser fraterno con los miembros de la orden, respetar la opinión ajena y ser útil a la sociedad.

No importa como llames a tu dios, mientras te haga mejor hombre. No siempre compartiré vuestra opinión, pero la respetare para que siempre la tengas. No esperare a que me pidas apoyo, os ayudare en todo lo que me sea posible sin esperar nada a cambio. Para que lo mencionada pueda suceder, es necesario buscar la luz, del conocimiento, la investigación y la práctica, como lo hicieron a través del tiempo los constructores, hoy mejor conocidos como los masones.

Las sucesivas sincretizaciones ocurridas en Babilonia, Egipto, Irán e India a su vez serán sincretizadas en Grecia y Roma. El judaísmo a partir de Abraham fue bebiendo de diferentes tradiciones, mitos y leyendas que incluían en la suya hasta que finalmente redactaron la biblia, luego de un prolongado cautiverio en Babilonia del cual retornaron para reconstruir el templo de Salomón. El judaísmo luego se fraccionara en tres expresiones diferentes: El judaísmo, el cristianismo y el islamismo. Las escuelas masónicas de los constructores también se fracciono junto a ellos, pero mantuvieron sus tradiciones similares, y es así como llegaron hasta nuestra época, por ello no debe sorprendernos encontrar masones judíos, cristianos e islámicos, como no nos sorprende que las tres más grandes religiones del mundo (judío, cristiano e islam), afirman que Abraham fue su Patriarca al igual que Moisés.

Lo mencionado es tratado en el Primer Tomo de estos libros con el sugestivo titulo "Los Dioses Voladores". Para el Segundo Tomo el autor desarrolla las corrientes religiosas que se basan en las "escrituras sagradas", por ello titulo la segunda parte como "Las Religiones del Libro".

En esta segunda parte el autor nos dice:

Las ideas religiosas se entretejieron en el Medio Oriente, África y la India, todas ellas vinculadas no solo territorialmente, sino también en sus concepciones. Así los Sumerios y los posteriores mesopotámicos, los Egipcios del África y los hindúes, tuvieron como dioses a seres llegados del cielo, que los salvaron del diluvio y que les ayudaron a reconstruir la civilización. Les enseñaron diversas artes y ciencias. En esta convivencia se ayuntaron los seres llegados del cielo con las hijas de los humanos, procreando hijos que se multiplicaron. Los llegados del cielo se enemistaron y pelearon entre sí, formando bandos entre los humanos que los apoyaban, así la guerra de los dioses y los hombres se pelearon con poderosas armas y vehículos que surcaban los aires a gran velocidad. Luego de guerras atómicas, concluyeron sus diferencias, repartiéndose el mundo, para gobernarla y los humanos los servirán como a dioses.

Llego el tiempo de los grandes imperios, de los grandes dioses y de las religiones del libro. Las sociedades secretas e iniciáticas evolucionaron al igual que las religiones y guardaron los conocimientos bajo nuevas formas, estas tenían su cuota del poder temporal y constituían el soporte de los gobernantes tanto en los aspectos religiosos como en los del saber humano. Las escuelas iniciáticas o de misterios, utilizaban un lenguaje simbólico para trasmitir sus conocimientos a sus adeptos y al igual que las religiones ritualizaron sus actos.

Estamos convencidos que le gusto la primera parte, y seguro le apasionara la segunda. En esta segunda parte veremos como Zaratustra le da forma a la religión en el Irán y define el cielo, el paraíso, el demonio, la destrucción del mundo y el juicio final. El surgimiento del Sol Invictus personalizado en el dios Mitra, sus usos y costumbres religiosas que influenciaran más adelante en Roma al imperio y a su proyecto del Imperium Cristianum. Como se sincretizan todas las formas de expresión religiosa y filosófica existentes hasta entonces en Grecia. El nacimiento de un imperio y su necesidad de contar con una iglesia y religión única que soporte el poder imperial romano. Finalmente como se forma el islamismo y sus diferencias con el judaísmo y cristianismo.

Mientras se desarrollan todas estas religiones, se van formando también los símbolos masónicos de la masonería operativa que luego de 1,717 se transformara en la masonería simbólica que hoy conocemos. Todos los documentos antiguos de la masonería dicen que los orígenes de la orden están en los inicios del arte de la construcción, así el primer constructor fue Caín que construyo la primera ciudad llamada Enoc, antes del diluvio (Manuscrito Cook), La torre de Babilonia comenzó a erigirse, La más grande obra de cal y piedra Que jamás hombre alguno haya visto; Tan alta y grande fue pensada Que siete mil su altura sombra arrojaba (Manuscrito Regius).

Durante la construcción de la torre de Babilonia, se hacía mucha masonería. El rey de Babilonia, que se llamaba Nemrod, era él mismo masón y amaba el oficio (Manuscrito Gran Lodge 1,583, Manuscrito Dumfries 1,710 y La Masonería Según Las Escrituras 1,737), más adelante estos documentos dicen: Cuando Abraham y su esposa Sara llegaron a Egipto, habló de las siete artes a los egipcios. Es decir todos estos documentos sitúan a los primeros constructores después del diluvio en la torre de Babel, construido por Nemrod un ilustre sumerio, como ya hemos visto en la primera parte del presente trabajo y de allí se fueron esparciendo por el mundo llevando su oficio de constructor y sus creencias religiosa hasta llegar por fin al Imperio Romano y de allí perpetuarse en las religiones más importantes del mundo: El cristianismo, islamismo y judaísmo.


Los dos tomos del libro "Religión y Masonería", expresan de manera clara y documentada como se formaron las religiones y las sociedades iniciáticas como la masonería. Su autor es Herbert Oré Belsuzarri, un investigador muy reconocido en materias masónicas, que expone su fundamentada opinión para esclarece no solo a masones, sino que también aporta para quienes no lo son, en un lenguaje sencillo y ameno. Sus lectores dicen que "no pararon de leer" hasta terminar ambos libros. Le toca a Ud. averiguarlo porque.

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domingo, 10 de diciembre de 2017

ABRAHAM EL PATRIARCA GUERRERO






"La historia de Abraham es el relato de una migración, y de las consecuencias que se derivan de ella, en el seno de la humanidad nacida de Noé bíblico, Yahvé elige un pequeño clan, Abraham obedece la orden de partida y cree en la promesa que le hacen; lo que está en juego a partir de ese momento es saber si Abraham lograra establecerse en Canaán y en qué condiciones va obtener descendencia con su mujer, también importara saber cuál de los dos hijos, Ismael o Isaac, obtendrá la herencia paterna prometida por su dios.

El Señor (Yahvé), se fijó en Abram de un modo muy especial y lo eligió para realizar una misión importantísima. Todo empezó un día cuando le dijo estas palabras:

“Sal de tu tierra, de la casa de tu padre y de tus parientes, y ve a una tierra que yo te mostraré. Yo te haré padre de un gran pueblo, te bendeciré y engrandeceré tu nombre, y serán bendecidas en ti todas las familias de la tierra” (Génesis 12). Y así empieza la historia hebrea.

Ur fue el centro principal del culto al dios luna sumerio de nombre Nanna, que era hijo de Enlil y padre de Inanna y Ereshkigal. A este dios, los acadios y babilonios llamaron Sin. El Tanaj y la Biblia se refiere a la ciudad de Ur como: “Ur de los caldeos” (Bereshit o Génesis 11: 28). Los caldeos ocuparon esa ciudad hacia el 900 a. C., mientras otros lo consideran entre el 600 y 500 a. C., lo cual indicaría que el génesis fue escrita luego de esa fecha; ello genera una duda, ya que la tradición hebrea dice que Moisés escribió el Génesis y los otros cuatro libros que forman la Tora o Pentateuco, y Moisés conforme a los estudiosos bíblicos murió en el s. XIII a. C. Si eso es real, la duda nos presenta dos interrogantes:

La primera.- Si Moisés escribió el Bereshit o Génesis, y vivió durante el s. XIV y XIII a. C. ¿Cómo podía afirmar que en ese tiempo era “Ur de los caldeos”?, si por entonces conforme a las evidencias antropológicas e históricas en Ur no habían estado los caldeos, ese territorio había sido ocupado por los sumerios y acadios a quienes los vencieron luego los babilonios en el s, XVIII a. C. Esto quiere decir que Moisés no escribió el Bereshit o Génesis.

La segunda.- El Tanaj y la Biblia dice que Abram salió de Ur para dar origen a la migración hebrea hacia Palestina, el cual debió ocurrir hacia el año 1,900 a. C. (s. XX a. C.), según los estudiosos de estos libros. Por entonces en Ur gobernaban los lugal de la III Dinastía sumeria de Urim llamado también “III Imperio de Ur” o Imperio neo sumerio entre el 2,112 al 2,004 a. C. (s. XXI a. C.), a ella le sucedió la “Dinastía Isin” que gobernaron entre el 2,004 a. C. al 1,801 a. C. (s. XXI a. C. hasta el s. XIX a. C.), con su primer gobernante el Lugal Icbi-Erra (2,004 a. C. – 1,971 a. C.) seguido por Cu-Ilicu (1,971 a. C. – 1,961 a. C.), Iddi-Dagan (1,961 a. C. – 1,940 a. C.), Icme-Dagan (1,990 a. C. – 1,920 a. C.), Lipit-Ectar (1,920 a. C. - 1,909 a. C.), Ur-Ninurta (1,909 a. C. – 1,881 a. C.). Es decir la ciudad sumeria de Ur, nunca antes había sido caldea, ya que ello ocurrirá hacia el año 1,730 a. C. cuando los babilonios llegan al poder (s. XVIII a. C.) en alianza con los caldeos que eran tribus sumir o turaquis ubicados entre Siria y Mesopotamia superior. Por tanto se puede afirmar que su padre y Abraham el patriarca de los hebreos era un sumerio. La Lista Real de Reyes Sumerios utilizados para esta explicación es la proporcionada por Zecharia Setchin, que elaboró a partir de varias que se complementan para finalmente hacerla más completa.

Hablar propiamente de Caldea o primer Imperio caldeo-babilonio, se inicia con Nabopolosar (626 a. C. – 605 a. C.) s. VII a. C., y concluye con Belsasar en el 539 a. C. (s. VI a. C.).

La Biblia dice que Abram salió de Ur, ciudad sumeria donde se adoraba a la luna bajo el nombre del dios Sin, pero no afirma donde nació".

El libro "Abraham el Patriarca Guerrero", escrito por el distinguido autor y escritor masón Herbert Oré B. nos plantea una serie de interrogantes, que son analizados con las escrituras cuneiformes de los sumerios, acadios y babilonios, escrituras hebreas como el Tanaj y el Antiguo Testamento de la Biblia cristiana, en una lectura amena e intrigante, que nos permite sacar conclusiones personales, con las más recientes evidencias sobre este apasionante tema que tiene eco en las tres religiones más importantes del mundo, las llamadas religiones abrahamicas por un lado y de otra, en varias organizaciones iniciáticas como la masonería y el rosacrucismo.

Este libro es simplemente magnifico, no solo por el tema que trata, sino también por la forma didáctica y amena, con la que se aborda un tema tan controvertido.

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domingo, 3 de diciembre de 2017

REVISTA DIALOGO ENTRE MASONES DICIEMBRE 2017

REVISTA
DIALOGO ENTRE MASONES DICIEMBRE 2017

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